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Homilía II domingo de adviento

EXORDIO
En cierta ocasión un campesino se acercó al pueblo vecino para ver las obras de la carretera que ahí se estaba construyendo. Se le acercó un ingeniero y le dijo que él era el director de la obra, que él había hecho los estudios del terreno y que el mismo había hecho el trazado de la carretera. Además le preguntó si era la primera vez que veía una obra de este tipo.

El campesino le dijo que si

El ingeniero un poco curioso le preguntó cómo le hacían en su pueblo para trazar la carretera de un pueblo a otro.

El campesino le dijo que traían un burro del otro pueblo y lo soltaban. Y el burro siempre buscaba el camino más seguro y mas corto para llegar. Y la ruta del burro era la que utilizaban para trazar la carretera.

Y que hacen ustedes -preguntó el ingeniero- cuando no tienen un burro.

Muy fácil dijo el campesino: traemos un ingeniero.

PROPOSICIÓN


Para allanar los caminos del Señor, no basta nuestro burro, necesitamos un ingeniero: el Espíritu Santo

DESARROLLO:
La liturgia de hoy nos invita a allanar los caminos del Señor, aplanar las montañas, rellear los valles. Mas ¿Qué significa esto? Significa que el adviento no es simplemente un tiempo de espera, es un tiempo de conversión y de preparación para la venida de Cristo.

  1. Despójate de tus vestidos de luto
    1. Rellenar los valles de la sensualidad y del pecado
    2. Rebajar las colinas del orgullo y soberbia
    3. Esas son las vestiduras de luto y por tanto para revestirnos con el esplendor de la gloria de Dios que viene, no bastan buenos deseos sino una obra de envergadura.
    4. Para ello necesitamos de un Ingeniero
  2. Es el Espíritu Santo que comenzó la obra en nosotros y la irá perfeccionando siempre hasta la venida de Cristo Jesús.
    1. San Pablo es plenamente consciente que los frutos de santidad que estamos llamados a producir, vienen de Dios.
    2. Dejemos que el Espíritu Santo allane toda colina de soberbia
    3. Dejémosle que nos trasforme en hombres nuevos
  3. De esta manera podremos repetir con el salmista que grandes cosas ha hecho el Señor por nosotros
    1. Importante que no olvidemos sus acciones desarrolladas en el pasado y que ahora quiere volver a realizar.
    2. El nunca se cansa
  4. Finalmente Juan el Bautista nos viene a recordar qué es el Adviento:
    1. Un camino de conversión y penitencia por una parte.
    2. Por la otra un recorrido de alegría y gozo porque el señor se acerca.

PERORACIÓN

No pretendamos superficialmente prepara los caminos del Señor, echando mano de nuestros buenos deseos. Entremos en oración profunda para que el Espíritu Santo termine en nosotros la obra que Él ha empezado.

Pregúntate que vas a hacer para estar atento a sus inspiraciones. Y no seas burro.

P. Agustín De La Vega, LC